Si ha estado involucrado en un accidente automovilístico y ha sufrido lesiones, es posible que reciba una oferta de liquidación temprana de la compañía de seguros de la parte responsable. Aunque puede ser tentador aceptar esta primera oferta, especialmente si enfrenta facturas médicas acumuladas y pérdida de ingresos, es importante entender que las ofertas iniciales suelen ser mucho menores de lo que realmente merece. A continuación, le explicamos por qué es prudente pensarlo dos veces antes de aceptar la primera oferta y cómo un abogado experimentado puede ayudarle a negociar una compensación justa por sus lesiones y pérdidas.
- Las Compañías de Seguros Buscan Liquidar Rápido—y Barato
Las compañías de seguros son negocios con fines de lucro que buscan reducir sus pagos siempre que sea posible. Una liquidación rápida los beneficia al cerrar el caso antes de que usted tenga la oportunidad de evaluar completamente el impacto de sus lesiones y pérdidas financieras. Las ofertas iniciales suelen ser bajas porque los ajustadores de seguros saben que muchas personas se sienten presionadas a aceptar rápidamente, especialmente si enfrentan dificultades económicas.
La primera oferta generalmente refleja el monto mínimo que la compañía de seguros piensa que puede conseguir que acepte, a menudo muy por debajo del valor real de su reclamo. Aceptar esta cantidad podría significar dejar una compensación significativa sobre la mesa, que podría ser esencial para cubrir costos médicos a largo plazo o pérdidas de ingresos en el futuro.
- Es Posible que No Conozca Toda la Extensión de Sus Lesiones
Las lesiones por accidentes automovilísticos no siempre son evidentes de inmediato, y los síntomas pueden empeorar con el tiempo. Por ejemplo, el latigazo cervical, las lesiones de espalda e incluso el trauma en la cabeza pueden no mostrar síntomas completos hasta días o incluso semanas después del accidente. Además, algunas lesiones pueden requerir atención de seguimiento, cirugías, terapia física o medicamentos a largo plazo.
Al esperar para llegar a un acuerdo, se da tiempo para obtener una imagen completa de sus lesiones, lo que ayuda a garantizar que cualquier compensación que reciba refleje los costos reales de su atención médica y recuperación. Liquidar demasiado pronto puede significar aceptar una cantidad que no cubre todos los gastos médicos futuros, dejándole con costos de bolsillo en el futuro.
- Las Ofertas Iniciales Rara Vez Cubren el Dolor y Sufrimiento
Las compañías de seguros tienden a enfocarse en los costos directos y cuantificables de sus lesiones, como las facturas de emergencias y los daños al vehículo. Sin embargo, también tiene derecho a una compensación por daños no económicos, como el dolor, el sufrimiento y el estrés emocional causado por el accidente. Estas pérdidas intangibles pueden tener un impacto significativo en su calidad de vida y pueden ser tan importantes como su recuperación física.
Las ofertas iniciales rara vez consideran una compensación adecuada por el dolor y sufrimiento. Un abogado experimentado puede evaluar estos factores y asegurarse de que se incluyan en su liquidación, logrando un resultado más completo.
- Un Abogado Puede Evaluar el Valor Real de Su Reclamo
Un abogado experimentado en accidentes automovilísticos tiene el conocimiento y los recursos para evaluar con precisión el alcance total de sus pérdidas. Toma en cuenta no solo sus gastos médicos, sino también la pérdida de ingresos, la disminución de la capacidad de ganancia, las necesidades de atención a largo plazo y el impacto emocional del accidente. Al contar con la evaluación de un abogado, puede evitar el riesgo de subvalorar su reclamo y llegar a un acuerdo por menos de lo que merece.
Los abogados también saben cómo manejar las negociaciones con las compañías de seguros, asegurándose de que todos sus daños sean tomados en cuenta y que la compañía de seguros no lo presione a aceptar una liquidación rápida e injusta.
- Los Abogados Son Negociadores Expertos
Los ajustadores de seguros son negociadores capacitados cuyo objetivo es proteger los intereses de su compañía, a menudo a expensas de su compensación justa. Cuando tiene un abogado que lo representa, se nivela el campo de juego. Los abogados son expertos en negociar con compañías de seguros, entienden las tácticas que usan y las contrarrestan eficazmente para asegurarle una compensación justa.
Un abogado competente puede evaluar la oferta inicial, presentar pruebas y negociar una liquidación que refleje con precisión la gravedad de sus lesiones y el impacto en su vida. No se dejará intimidar por ofertas bajas y puede aconsejarle cuándo vale la pena insistir en un mejor resultado.
- Una Vez Que Acepta, No Puede Reabrir el Reclamo
Cuando acepta una oferta de liquidación, generalmente viene con una liberación de responsabilidad, lo que significa que renuncia al derecho de solicitar compensación adicional por el mismo reclamo en el futuro. Si surgen problemas médicos inesperados más adelante o sus lesiones resultan ser más graves de lo que pensaba, no podrá reabrir el reclamo para solicitar fondos adicionales.
Al esperar hasta comprender completamente el impacto de sus lesiones, se protege de recibir una compensación insuficiente y asegura que tenga los recursos necesarios tanto para su recuperación actual como futura.
Conclusión: Tómese Su Tiempo y Obtenga Ayuda Legal
Aceptar la primera oferta de liquidación después de un accidente automovilístico puede ser un error costoso. Aunque el dinero rápido puede parecer atractivo, a menudo es mucho menos de lo que realmente merece. Consultar con un abogado de lesiones personales le da la ventaja de conocer el valor real de su reclamo y le permite tomar una decisión informada sobre si aceptar una oferta.
En nuestro bufete, entendemos los desafíos que enfrenta después de un accidente automovilístico y estamos aquí para luchar por la compensación que merece. Permítanos manejar las negociaciones mientras usted se enfoca en su recuperación. Contáctenos hoy para programar una consulta y conocer cómo podemos ayudar a proteger sus derechos y maximizar su liquidación.